Sofia

Sofía es una señora de unos 65 años. Regordeta, coqueta, tiene la cara redonda, pero un cutis de muñeca, los pómulos bien ubicados, y el maquillaje siempre en su lugar. No todo se lo debe a la naturaleza, se hizo unos pequeños retoques, que incluyen maquillaje semi permanente, pero tan bien hecho que nunca lo hubiera notado si ella no me lo contaba. Ademas de eso, tiene un corte carre, reflejos adecuados para su pelo oscuro, y siempre está bien peinada, se viste de manera sobria, usa los zapatos para su edad y supongo que debe tener pie plano o algo así, por que parecen zapatos ortopédicos.

Sofía jamás dice malas palabras, ni es grosera. Tampoco tolera que los demas lo sean, por eso no tiene problemas en decir que la frase “ni en pedo” queda mal en una señorita. Si, Sofía es intolerante.

Sofía es cariñosa, está casada, tiene hijos y nietos. Sabe dar buenos masajes y algo me dice que no cocina bien, pero que lo intenta. Por supuesto, ella es

Sofía siempre tiene algo para acotar, para charlar, para decir, y siempre piensa diferente del resto, no compartimos una sola opinión con ella. Y no tiene problema en contarte el final de Sex & The City, por que sus ansias por hablar son tan grandes que no mide el efecto de sus palabras. Claro que si, Sofía es una charlatana.

Claramente, Sofía es el origen de todas nuestras risas, carcajadas, gritos desaforados pidiendole que no le pregunte mas a Ana por su ex, asi no se pone a llorar en la clase. Si si, Sofía es insoportable.

El gran problema de ello lo vi claramente cuando me di cuenta de que yo soy una versión de ella en pequeño. Si, el problema de todo es que temo convertirme en Sofía cuando sea grande, y creo que eso es lo que mas me molesta de ella.