martes, agosto 30

Grissinopoli.

Los productores, unos grosos
Domingo a la noche, poca plata, mucho embole, que hacemos? Cine barato, te va? ok! Bueno, asi que nos fuimos al Tita, a ver "Grissinopoli". Y nos encontramos con un documental muy fuerte a cerca del pais. Cómo todos sabrán, Grissinópoli es una fábrica de grisines, que fue abandonada por sus dueños, y tomada por sus empleados, en una lucha por conservar su fuente de trabajo. Los empleados de la fábrica, cómo ustedes también sabrán, no son estudiosos de las artes de los negocios, ni siquiera son estudiosos de nada, son simples personas, como vos, como yo, que tienen su trabajo, y que un día se vieron privados de el. Ahora, lo que diferencia a estas personas de muchos de nosotros es que cuando les cerraron la fábrica no dijeron "pucha, que mala suerte" y se fueron a sus casas a buscar otro trabajo, sino que dijeron "si te cagás me vas a dejar en la calle" y salieron a lucharla, 16 personas se atrincheraron en la fábrica durante tres meses hasta que lograron un permiso para trabajar en ella y administrarla por dos años, conformando para ello una cooperativa (La Nueva Esperanza Ltda.).

Sólo quiero agregar al respecto que en el documental no hay actuaciones ni entrevistas planeadas, se filmó a la gente en sus actividades normales, marchas, visitas del abogado, discusiones, al mejor estilo Gran Hermano, y se editó una película.

Pero lo mas importante que quería decirles es que no pueden dejar de ver esta pe
lícula, es un documento de nuestro pais, y de que se puede, de que no hay que dejar que nos pasen por encima ("que nos pisen como cucarachas" como dijo una de las trabajadoras), de que no importa cuanto sabés de la vida, de administración de empresas ni de modales, sólo importan las ganas de no quedarse en la nada, las ganas de construir. De verdad, no pueden dejar de verla, por que no pueden dejar de creer.

Además, con ir a verla (vale 2 pesos si van con cualquier certificado de estudiante, la dan a las 20.30) colaboran con la cooperativa y, si tienen suerte, se pueden encontrar con que los productores de la película,
Luis Camardella y Darío Doria están ahí para contestarles todas las dudas o preguntas, y de paso, les regalan unos grisines, para que los prueben :p.

No se como se llama lo mío, si nacionalismo o si idealismo, sólo se que yo no me quiero quedar con los brazos cruzados por que yo creo en mi pais. Espero que seamos muchos mas
.
(update: hay un ciclo de cine cubano, que seguramente vale la pena, acá les dejo la info, por si les interesa, gracias Tina por el dato.)


Blogger Josi dijo...

Bueno, lo lei.
Hay hisotrias como estas. Hay pocs.
Yo hice lo que pude hasta que me rendi.
No estoy dispuesto a dar la unica vida que tengo en una lucha que yo -con mi modesto criterio- veo que ya la perdi.
Entonce sme voy a algun lugar donde pueda ser escuchado.
Y en eso estoy.
No somos superman los humanos. Hacemos lo que podemos.
Ojala tengas tu grissinopolis en la vida y te sientas tan realizada como yo hoy en dia.  


Anonymous Anónimo dijo...

Viste, por poco nos cruzamos.
Unos compañeros de la facultad habían hecho un trabajo sobre la cooperativa de grisinopolis.
Y Darío Doria (por la cara y el apellido) debe ser el hijo de Jorge Doria, el director... que a la vez es un gran luchador.
Anotado.  


Blogger g dijo...

eh nena! yo siempre entro a tu blog...que no deje comments es otra cosa...beso  


Anonymous Anónimo dijo...

UYYY graciasp por el post este, sabes que sabia que existia pero no donde la daban, intentare ir de inmediato, exelente comentario.
Saludillos  


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