martes, septiembre 20

Mi noche con Maud



El sábado vi "Ma nuit chez MAud" (1969) De Eric Rohmer. Y el chabón está re loco. La película es re loca, es demasiado para mi.

El amor pasa frente a vos, la vida pasa, y vos tomás lo que querés, o lo que podés. Dos oportunidades, dos caminos, dos mujeres, y hay que elegir. Uno elige de acuerdo a sus gustos, su condición social, su entorno.

La verdad es que, para ser del 69, es re actual la película, un hombre tiene ante si a dos mujeres completamente opuestas, y elige a la rubia, obvio, ya lo decía
Howard Hawks, en 1953.
Igualmente, no se si lo que elige Jean Louis (
Jean Louis Trintignant) es quedarse con la rubia (Marie-Christine Barrault) o si descarta el debate con Maud (Françoise Fabian). El debate a cerca de todo, religión, política, filosofía, matemáticas.
O quizás es mas sencillo que eso, y simplemente intenta transmitir que uno elige, bien o mal, sólo elige, y listo, no importan tanto las opciones, sino, sólo importa el hecho de que pasen las cosas, por que si, por el amor, por lo que sea.
O quizás, su noche con Maud, significó mas que toda su vida, su rubia, su carrera, lo que sea. Por que? No lo se, por que si, por que no, por que no hay razones para todo, por que la mayoría de las veces no hay razones para las cosas.
Uff, bueno, no hay respuestas, sólo hay preguntas, por que elegir esto, por que descartar aquello, por que resistirse, por que aflojar, por que perdonar, por que olvidar. Basicamente eso.

Película en blanco y negro, los actores son geniales, y me encanta el francés, el ciclo termina esta semana,
aca hay mas info.


Anonymous Anónimo dijo...

Elije a la rubia para evitar tener que discutir con la "no rubia" (supongo que es morocha, aunque podría ser colorada, y ojo con las coloradas que son muy especiales también). Elije por la tangente, por la más facil. No le interesa elegir una mujer para debatir sus ideas... pensará que para eso estarán los amigos, no?  


Blogger Carla dijo...

vos crees? todavía me cuesta creer que uno elige el "amor" por la facilidad, que ingenuos que somos!  


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